27 enero 2011


GERMEN DE TRIGO

El germen de trigo representa apenas el 2,5% del grano y es el embrión que permite el nacimiento de una nueva planta. Posee preciosos elementos nutritivos y es una gran reserva de vitalidad. En realidad no se considera un alimento en el verdadero sentido de la palabra, sino más bien un potente y versátil suplemento nutricional.
La historia del germen de trigo nace con la refinación industrial de la harina. Moliendo el grano de trigo, el germen es pulverizado con el resto de la semilla, aportando a la harina completa (integral) su riqueza nutritiva y sus sensibles ácidos grasos. Pero estos últimos reducen la conservación de la harina, pues los lípidos poliinsaturados se oxidan fácilmenteenranciamiento representa una limitante para el almacenamiento de la harina integral. Quitando el germen se evita el problema y la conservación se amplía; por eso se desarrolló la industria refinadora. Lo mismo ocurre con la polenta: al grano de maíz se le quita el germen, el cual se destina a la producción de aceite. En el caso de la harina de trigo refinada (blanca), además del germen, también se le quita el salvado (pericarpo), que es la cubierta celulósica externa del grano. y el
Inicialmente (comienzos del siglo XX) los desechos de la refinación de la harina de trigo (el germen y el salvado) se destinaban a suplementar la alimentación animal. Luego los científicos descubrieron la cantidad de nutrientes presentes en el germen, el cual comenzó a ser separado del salvado, para comercializarlo como suplemento alimentario. En razón de los grandes volúmenes de producción de harina blanca, el germen es un subproducto industrial de bajo precio en relación a su gran riqueza nutritiva.
Dado que el germen genera el desarrollo embrional de la nueva planta y la asiste en sus primeros estadios de crecimiento, está dotado de todos los elementos necesarios para tal fin: proteínas, grasas, vitaminas, enzimas, minerales y hormonas vegetales. A nivel de macronutrientes, el germen posee un 26% de proteínas de alto valor biológico (no es carente de lisina, cosa que ocurre con la proteína del grano de trigo) y con mayor cantidad de aminoácidos esenciales que la carne vacuna. Los carbohidratos (almidón y azúcares simples) equivalen al 50% de su estructura. La materia grasa representa el 10% de su peso; el 86% son ácidos grasos insaturados, de los cuales el 74% son esenciales y están casi en la relación ideal (4:1) entre los omegas 6 y 3.
Respecto a minerales, el germen es rico en hierro, calcio, fósforo, potasio, magnesio, manganeso, cobre, cobalto, molibdeno, selenio y sobre todo cinc (es la fuente vegetal más rica en absoluto y equiparable a la levadura de cerveza). En materia vitamínica, su principal virtud es el alto contenido de vitamina E (tocoferol), siendo el alimento más dotado en absoluto. También posee vitaminas A, B, C y K; resulta ser la fuente alimenticia más rica en cuanto a B1 y B2, y la fuente vegetal mejor dotada de las imprescindibles B12 y ácido fólico (sólo superada por la levadura de cerveza). Además posee gran concentración de colina (lecitina) y buena dosis de otras sustancias antioxidantes como el ácido lipoico y la enzima superóxido dismutasa.
Este caudal de componentes torna al germen de trigo extremadamente útil para mejorar el metabolismo graso. Por su riqueza constitutiva, se convierte en el complemento ideal para personas con trastornos del sistema nervioso (astenia, depresión, estrés, nerviosismo, etc), esterilidad, enfermedades coronarias, hiperlipidemias (exceso de grasa en sangre), diabetes, deficiente irrigación cerebral, inflamación prostática, irregularidad menstrual, problemas de piel y cabello, intelectuales, embarazadas, ancianos y convalecientes. Deportistas y atletas se benefician de su contenido en octacosanol, sustancia que aumenta la resistencia a la fatiga, la potencia muscular y el rendimiento físico. Esto también lo hace efectivo para personas sujetas a exigencias puntuales (trabajo de físico, estrés, exposición al frío). Generalizando, se suele recomendar el consumo de entre dos y cuatro cucharadas diarias de germen de trigo.

Recomendación: Es muy bueno tomarlo en la mañana, agregando a un jugo de naranjas natural, esas tres cucharadas recomendadas. 


20 enero 2011

  
 Comparto con ustedes unos sabios consejos extraídos de un libro "de cabecera" sobre medicina china y diagnostico oriental.


   Comer para la salud y la felicidad


1. Dé las gracias por todos los alimentos que recibeLos alimentos nos

llegan como regalo del «Dador de la Vida». Recíbalos con humildad y
gratitud. Se nos dan para mantener la vida en la Tierra y para ayudarnos
a hacer realidad nuestros más acariciados sueños. Por suerte o por desgracia, nací durante la Segunda Guerra Mundial y me crié en Hiroshima, de modo que mi estómago experimentó la verdad de lo que estoy
diciendo. Cuando recibimos el alimento, nos llega con amor, como una
bendición del mundo.
2. Coma alimentos completos. Los seres humanos somos productos de
la naturaleza al igual que lo son las estrellas, los árboles y las plantas. Somos uno con la Tierra: sus minerales circulan por nuestra sangre; somos
uno con las plantas: sus elementos nutritivos hacen funcionar nuestras cé-
lulas y su fibra nos ayuda a eliminar los desechos indeseados; somos uno
con la lluvia: nuestros cuerpos se componen en su mayor parte de agua;
somos uno con el Sol: sus rayos dan vida a todo lo que hay en el planeta.
Evite los alimentos que han sido despojados de su contenido nutritivo o
que han sido tan procesados que son más productos de laboratorio que de
la naturaleza. Coma alimentos completos, frescos, no procesados y, siempre que sea posible, que sean cultivados orgánica o biológicamente. Estos 
alimentos le proporcionarán cantidades óptimas de nutrición y poder.
También le ayudarán a evitar substancias químicas dañinas que conducen
a la enfermedad y la desdicha. Lo conducirán a una vida armoniosa. 
Coma sobre todo cereales completos, como arroz, mijo, cebada, avena y
maíz integrales, y verduras frescas, particularmente de la variedad de hoja
verde, como son por ejemplo las coles y la lechuga verde. Los cereales integrales proporcionan energía en abundancia (los hidratos de carbono complejos son el combustible más eficiente y potente del planeta), así
como proteínas, vitaminas, minerales y fibra. Las verduras frescas son minas de vitaminas, minerales y fibra. Estos alimentos estimulan el sistema inmunitario y los órganos excretores y nos proporcionan energía duradera.
3. Mastique bien. La masticación es un paso esencial de la digestión.
Los seres humanos podemos comer cualquier cosa, pero primero debemos masticarla. El alimento que ha sido bien masticado, puede ser bien
digerido y eliminado. Los alimentos que se han masticado sólo parcialmente no pueden ser digeridos en su totalidad, producen todo tipo de
trastornos gástricos e intestinales y conducen a la enfermedad e infelicidad. Mastique cada bocado entre 35 y 50 veces; con ello obtendrá una
buena salud, pensamiento claro y digestión feliz. Masticar bien ejercita
los músculos de la boca, mandíbula y cuello, lo cual aumenta la irrigación sanguínea del cerebro, que necesita treinta veces más oxígeno que
el resto del cuerpo. Por eso, cuanto más se mastica, más inteligente se es.
4. Evite el exceso de grasa. La parte más peligrosa de la dieta actual es
la grasa. Está demostrado que es cancerígena. Obstaculiza la provisión
de oxígeno y sangre a los tejidos de todo el cuerpo. Sin sangre ni oxígeno las células mueren: el cuerpo envejece prematuramente y hacen su
aparición las enfermedades degenerativas. El consumo excesivo de grasa es causa de cáncer, enfermedades cardiacas, hipertensión, diabetes
mellitus no dependiente de insulina, demencia senil precoz y apoplejía.
Los alimentos de origen animal, especialmente la carne roja, los productos lácteos y los huevos, están cargados de grasa. Si consume estos
alimentos, cómalos con moderación.
5. Coma alimentos propios de la región y la estación. Vivimos en condiciones climáticas específicas, igual como las plantas que crecen a
nuestro alrededor. Deberíamos comer los alimentos que viven en las
mismas condiciones que nosotros. A las personas que viven en Alaska
les va mejor comer pescado y grasa de ballena que comer los alimentos
y frutas propios de Brasil, y viceversa. Lo mismo vale para todos los
otros climas. Cuando comemos los productos de la naturaleza, consumimos la energía que entró en la creación de esas plantas. Consumimos
nuestro clima y todas las energías que influyen en nosotros diariamente.
Esto facilita la adaptación del cuerpo a las estaciones, al tiempo atmosférico y a los retos que enfrentamos en nuestra vida cotidiana. Si no puede comer alimentos cultivados en su región, coma alimentos que se produzcan más o menos en la misma latitud. Trate de evitar los alimentos
que no crecen en su propio clima. 
6. No coma en exceso. Comer en exceso sobrecarga el organismo, añade kilos y dificulta la digestión. Esto favorece las enfermedades cardiacas, los problemas intestinales y hepáticos y entorpece el pensamiento.
En Japón decimos que cuando el estómago está un poquitín vacío, la
mente está ávida de conocimiento. Pero cuando el estómago está lleno, la mente también está llena. Yo creo que si comiéramos menos, tendríamos menos problemas de salud. 
7. No coma inmediatamente antes de acostarse. Es un hecho bien documentado que durante el sueño el cuerpo se cura a sí mismo. Sin embargo, esto no ocurre si el estómago está lleno al irnos a dormir. La energía que debería dedicarse a sanar se dedica a la digestión. 
                                                 Un estómago
lleno impide el sueño profundo y el adecuado descanso. También pienso
que un estómago lleno nos hace soñar en exceso y hace desagradables
nuestros pensamientos. Esto nos afecta al día siguiente, causándonos letargo y mal humor.


Estos son mis consejos para comer sano. No son demasiado rígidos.
Cualquiera los puede seguir, y obtener mucho provecho de ellos.


Wataru Oashi -Cómo leer el cuerpo-

19 enero 2011

Sal Marina

Grandes diferencias existen entre la Sal Marina y la Sal "Común"

La Sal Marina alimenta.


   Es el mayor concentrado de minerales naturales, en las exactas medidas que lo requieren las células.
   El mar se mueve ondulante desde hace millones de años, desgastando todos los minerales y piedras que existen en el planeta.  Esas partículas están en suspensión en el agua del mar. Evaporando dicha agua, se obtiene la Sal Marina. 
   Al analizarla verificamos que contiene, en proporciones casi idénticas que el suero sanguíneo, todos los minerales que el organismo requiere.
   Hay, además, moléculas de todas las piedras del planeta, sean de una montaña o del desierto. Todo termina en el mar, llevado por las lluvias.
  La sal de mesa común, en cambio, al pasar por un proceso de refinamiento, pierde todos los minerales que el cuerpo si necesita, y queda un 100% de sodio. Afectando la salud de todos los órganos del cuerpo.
  
  "Analizada desde el punto de vista químico, la diferencia entre una sal marina  y la sal de mesa común, resulta abismal. La simple evaporación del agua de mar, deja como consecuencia un residuo sólido, al cual llamamos sal. Este residuo está compuesto por los 84 elementos estables de la tabla periódica, aquella que estudiábamos en el colegio secundario. Por supuesto que el cloro y el sodio son los principales elementos cuantitativos, representando casi el 90% de su composición. Pero la importancia cualitativa de ese 10% restante es verdaderamente extraordinaria."


  Es tarea simple cambiar el habito y consumir Sal Marina, su precio es casi igual, su sabor es aún mas sabroso, y le damos a nuestro organismo, minerales que necesita.
   


17 enero 2011

Semillas de la buena Salud.


CHIA

Historia 
Para los mayas, la chía era uno de los cuatro cultivos básicos destinados a su alimentación, junto al maíz, el poroto y el amaranto. De allí que ofrendaban estas semillas a los dioses, en agradecimiento por las cosechas. Los aztecas usaban la chía en distintos preparados nutricionales y medicinales

Propiedades 
Las semillas de chia tienen un gran aporte de ácidos grasos esenciales, representan la fuente vegetal con más alta concentración de omega 3. Poseen un 33% de aceite, del cual el ácido linolénico (omega 3) representa el 62% y el linoleico (omega 6) el 20%. 
Estos disminuyen el índice de enfermedades coronarias; ayudan a normalizar la presión arterial elevada; reducen el nivel de colesterol; protegen al corazón contra daños causados por ataques cardíacos; juegan un papel fundamental en el mejora de los sistemas nervioso e inmunológico; ayudan en el sano desarrollo del embarazo y del crecimiento infantil.  
Ademas la semilla de chía está muy bien dotada de antioxidantes, los cuales, además de resultar un saludable aporte dietario y terapéutico, sirven a la buena conservación del aceite. Los antioxidantes, además de proteger los ácidos grasos, nos protegen de tumores, afecciones cardiovasculares, inflamaciones, virus y radicales libres. La chía tiene buena dosis de proteína, no posee gluten. 
En materia de vitaminas, es una buena fuente del grupo B, pero es en materia de minerales que la chía vuelve a destacarse. En materia de calcio entre 6 y 10 mas que la leche. Además posee gran riqueza en magnesio, potasio y fósforo, minerales sinérgicos al calcio. En materia de oligoelementos, la chía es una gran fuente de hierro. Este valor  casi triplica al hígado vacuno. La chía también contiene buenos valores de cinc y manganeso, siendo muy pobre en sodio. Otra virtud de la chía es su buena cantidad y calidad de fibra, sobre todo en forma de fibra soluble (mucílagos). Este tipo de fibra retarda el índice de glucosa en sangre y reduce la absorción de colesterol.

GIRASOL  

Historia                                                                                                                                                     Nativo de las fértiles llanuras de los Estados Unidos, se estima que el cultivo del girasol se realiza desde el año 900 a.C. Las tribus indígenas americanas lo cultivaban para usos muy variados, entre ellos el consumo de las pepitas como fuente de energía. 

Propiedades 
El girasol es apreciado por su cualitativo aporte de vitaminas (sobre todo algunas claves como la B1, ácido fólico, B12, D y E), minerales (principalmente hierro, magnesio, calcio, fósforo, cinc y potasio), proteínas (23% de su peso) y enzimas digestivas. Contiene abundante vitamina E , potente antioxidante protector de los ácidos grasos. Esta cualidad se ve potenciada por la presencia de polifenoles, que inhiben la proliferación bacteriana, las infecciones y la producción de nitrosaminas cancerígenas en los intestinos. Desde el punto de vista energético, el girasol es acaso el vegetal terrestre más eficiente en la captación y almacenamiento de energía fotónica del sol, convirtiéndose sus semillas en verdaderas celdas solares.

LINO
                                                                                                                                                      Propiedades
Tiene un alto contenido de minerales (potasio, fósforo, magnesio, calcio, cinc, hierro), vitaminas B, C y E, enzimas y fibra soluble (mucílagos).
El lino es el vegetal con mayor contenido de lignanos, fitoestrógenos que ayudan al equilibrio hormonal femenino. Estas fitohormonas protegen especialmente contra tumores intestinales (colon) y de sensibilidad hormonal (mama, endometrio, próstata). Los mucílagos presentes en el lino, pertenecen al tipo de fibra carente en la dieta moderna: la fibra soluble. Además de activar la función intestinal, nutre la flora, neutraliza el exceso de acidez, estabiliza la glucosa en sangre y regula el colesterol.
El consumo regular de lino ayuda en problemas de piel seca, soriasis, acné, eccemas, sed anormal, síntomas menopáusicos, colesterol elevado, presión alta, constipación e inflamación intestinal, problemas cardiovasculares y circulatorios, diabetes, reumatismo, tumores y síndrome premenstrual. La medicina ayurvédica indica al lino para regenerar el tejido pulmonar, tanto en congestiones, afecciones crónica o procesos degenerativos.

SÉSAMO                                  

Historia                                                                                                                      
Es uno de los cultivos más antiguos de la humanidad. En la tumba del faraón Ramses III (siglo XIII a.C.) hay indicaciones sobre su uso culinario. En la antigua Grecia era conocido y apreciado, recomendándolo Hipócrates en sus escritos. En países de Oriente, como Japón y China, el sésamo constituye un alimento tradicional, pues posee la facultad de fortalecer el sistema nervioso, mejorar el metabolismo y prevenir varias enfermedades, entre ellas la arteriosclerosis y la hipertensión arterial, retardando el envejecimiento celular y favoreciendo la longevidad. En la India es símbolo de inmortalidad, representando el principio de la vida.

Propiedades 
Las semillas de sésamo contienen una amplia variedad de principios nutritivos de alto valor biológico. Tienen un 52% de lípidos, de lo cuales el 80% son ácidos grasos insaturados, principalmente omegas 6 y 9, lo cual les confiere una gran eficacia en la regulación del nivel de colesterol en sangre. Entre estos lípidos se encuentra la lecitina, grasa fosforada que desempeña una importante función en el organismo: es componente esencial del tejido nervioso, se encuentra en la sangre, el semen, la bilis e interviene en la función de las glándulas sexuales. La lecitina es un poderoso emulsionante que facilita la disolución de las grasas en medio acuoso, previniendo el agotamiento nervioso y cerebral. En la sangre mantiene disuelto el colesterol, evitando así su depósito en las paredes arteriales. El sésamo es, junto a la soja, el vegetal más rico en lecitina.
 El sésamo tiene proteínas, de alto valor biológico, formadas por 15 aminoácidos distintos con una elevada proporción de metionina (uno de los 8 aminoácidos esenciales). A nivel de vitaminas, el sésamo posee dos del complejo B (B1 o tiamina y B2 o riboflavina). También aporta buena cantidad de vitamina E (tocoferol), que es antioxidante y responsable de los siguientes procesos orgánicos: retardar el envejecimiento, reducir la tasa de colesterol, eliminar los metales tóxicos (las algas tambien son buenisimas para eliminar los metales toxicos), mantener el tono muscular y nervioso, la fertilidad, la virilidad y el índice de coagulación. Además el sésamo posee vitaminas B3, B5, B6, K, ácido fólico, biotina, inositol y colina.
 En minerales es donde se destaca, sobre todo por su alto contenido de calcio biodisponible. Pero la relevancia del sésamo respecto a los lácteos, es que también esta bien dotado de los minerales necesarios para que ese contenido de calcio pueda ser fácilmente asimilado por el organismo; nos referimos al magnesio, el fósforo, el silicio, el cinc, el cobre y el boro. Además el sésamo posee la mayoría de los demás nutrientes sinérgicos al calcio: ácidos grasos esenciales, vitaminas y aminoácidos. También posee cantidades importantes de potasio, hierro (10,4 mg contra 7,9 mg del “afamado” hígado), selenio, yodo y cromo.
Otros componentes interesantes del sésamo son sus antioxidantes, que han demostrado producir los siguientes efectos: retardan el envejecimiento celular, prolongando la vida útil de las células; actúan contra hongos y bacterias; inhiben el desarrollo de células cancerígenas; poseen acción antiparasitaria; eliminan radicales libres, interrumpiendo procesos de oxidación celular; se potencian con la vitamina E (alfa tocoferol) presente en la semilla, mejorando su absorción en el organismo y, en consecuencia, su acción antioxidante.
Completa la riquísima composición del sésamo, su excelente calidad de fibra. Además de la fibra insoluble, están los mucílagos presentes en la semilla, los cuales le confieren una suave acción laxante y un importante efecto protector de la flora intestinal.

AMAPOLA
La amapola es una flor roja que crece de forma casi salvaje, si bien no es de gran valor alimenticio se sabe que contiene ácido linoleico, colaborando así en la no formación de tumores.
Al contrario de su “prima” la adormidera, la papaver somniferum, ésta amapola no es tóxica. La amapola común ejerce un suave efecto sedante en el sistema nervioso y sirve para hacer disminuir la tos y para expectorar.
Las semillas de amapola constituyen una importante medicina natural, debido al papel que tienen como calmante nervioso del organismo. Tiene un efecto potente, y por ello se utilizan habitualmente para lograr calmar nuestros nervios y conseguir una total relajación del sistema nervioso. Por este motivo su uso es muy recomendado en épocas de tos nerviosa, espasmos, situaciones de estrés… Es por esto que se las considera un sedante natural. Su uso es recomendable en estados de estrés que se manifiestan de forma somática.

Extraído del libro “Alimentos Saludables ”.
Disfruten de esta informacion, si sabemos lo que comemos potenciamos las propiedades.